REFLEXIÓN

Reflexión

    Cuando nos presentamos al concurso teníamos bien claro que íbamos a trabajar mucho, y así ha sido. Lo que no teníamos tan claro era la cantidad de cosas que íbamos a aprender. A nosotros, que la idea de Europa nos parecía tan lejana, tan abstracta, nos ha cambiado la concepción gracias a este concurso: Europa no es lejana, es tangible, respiramos Europa en cada rincón, con fondos, obras, con banderas…somos Europa, ahora lo sentimos.

     Nos ha llamado mucho la atención el mal concepto que ahora hay de Europa. Pensamos que estamos en un momento en el que se critican todos los fallos, pero no se alaban los beneficios de ser europeo. Europa es un organismo vivo, un ente que aún es joven, que debe madurar, y de ahí sus fallos, pero todo es mejorable.

     En el artículo “30 años después: ¿una UE demasiado angosta para España?”, realizado por D. Andrés Ortega y publicado en el Real Instituto Elcano, se nos presenta una España y una Europa más bien negativas, nos habla de la pérdida de identidad y de democracia nacionales: las políticas públicas españolas vienen enmarcadas en los parámetros que se fijan en Europa, especialmente en la Eurozona, en la que participamos […] Lo que plantea un problema de democracia. Pues se está vaciando una parte importante de la democracia nacional, sin reemplazarla por otra europea”, pero nosotros preferimos ver el análisis que se realiza en el vídeo Representación de la Comisión Europea: El Misterio de los 30 años. Y si... ¿España nunca hubiera entrado en la Unión Europea? Donde se resaltan claramente los beneficios de pertenecer a la Unión Europea: desde favorecer el intercambio cultural (como apunta el periodista  Juan Ramón Lucas), la educación y la formación con becas Erasmus, Leonardo y prácticas a nivel europeo (según señala el responsable de la escuela de periodismo de El Mundo Antonio Rubio) hasta lo que ahora más nos atañe en este periodo de crisis, y es que no hay que olvidar las importantes mejoras en infraestructuras, la apertura comercial, las mejoras en educación y sanidad y los más de 7.000.000 de puestos de trabajo creados (José Carlos Díez, profesor de Economía de la Universidad de Alcalá de Henares).

     No debe ser tan malo esto de ser “europeo” cuando más del 70% de los españoles opinamos igual, según se refleja en el periódico nacional El País, en el artículo Valoración de 30 años de España en la Unión Europea (11/06/2015) a través de un sondeo de METROSCOPIA

     Nosotros, tras realizar todo nuestro trabajo de investigación, decimos que estamos orgullosos de ser europeos, que sabemos que Europa debe mejorar, pero que España ha mejorado muchísimo al pertenecer a la UE, no hay más que remitirse a los datos. Ahora conocemos todo lo que Europa hace por nosotros y, sobre todo, a través del Fondo Social Europeo, que es en el que nos hemos centrado, cómo aporta ayudas a fondo perdido para apostar por los jóvenes, por la formación y por los emprendedores…si no fuésemos Europa esto no sería posible.

     Por supuesto que hay que mejorar, sobre todo, bajo nuestro punto de vista, en el tema de inmigración y recepción de refugiados, ya que como se cita en el artículo anteriormente nombrado del Real Instituto Elcano toda Europa, incluida España, debería avergonzarse de su cicatería a la hora de acoger no inmigrantes sino refugiados”…pero tal vez todo esto se consiga cuando en vez de Europa seamos, como dijo Víctor Hugo “una gran nación llamada Humanidad”.

     Como grupo, y relacionados con la Unión Europea y el 30 aniversario de España en Europa, queremos destacar estas 10 ideas que recogen lo que más nos ha llamado la atención durante la realización de nuestro blog:

  •                Europa somos todos, no es algo lejano ni abstracto: somos nosotros.
  •             Todos los países miembros disfrutan de las ayudas a fondo perdido de la Unión Europea para mejorar en formación, educación y negocios, lo que supone, a su vez, una apuesta por la juventud europea (Fondo Social Europeo, en Melilla gran parte gestionado por PROMESA)
  •       La mayoría de mejoras en infraestructuras de nuestra ciudad están cofinanciadas por la Unión Europea (fondos FEDER)
  •          Aunque estamos en un período de crisis, desde nuestra admisión en la Unión Europea se han creado más de 7.000.000 de puestos de trabajo, lo que para un país que venía de una dictadura era impensable
  •                La Unión Europea está formada por multitud de países y culturas y todos podemos vivir en armonía y enriquecernos de esa pluralidad.
  •          Hemos aprendido de nuestros mayores: a escucharlos, a valorarlos por todo lo que han pasado, cómo estaban antes en un país cerrado culturalmente, políticamente, socialmente…con fronteras…y cómo vivimos ahora: en democracia, con libre tránsito y libertad de información.
  •          Ahora somos conscientes de que aunque parezca inevitable la “fuga de cerebros” españoles esto nos enriquecerá culturalmente y seguiremos siendo europeos, más europeos aún al poder trabajar en el extranjero pero dentro de nuestra unidad que es Europa.
  •           También hemos conocido salidas y ayudas que nos ofrece la Unión Europea y de las que no éramos conscientes hasta ahora. En nuestra ciudad hay ayudas para jóvenes empresarios gracias al Vivero de Empresas, de formación gracias a PROMESA y a la Escuela de Hostelería, y ayudas para buscar trabajo y formación a través de Melilla Orienta.
  •              Hemos conocido banderas y países que también forman parte de la Unión Europea y que desconocíamos.
  •          Somos conscientes de algo que antes dábamos por sentado: ha costado mucho trabajo ser europeos.


De esta experiencia también queremos destacar otros aspectos más personales que hemos adquirido gracias a este proyecto:

  •           HEMOS APRENDIDO A TRABAJAR EN EQUIPO
  •         Hemos aprendido a administrar mejor nuestro tiempo para compaginar los estudios con las diversas actividades realizadas para este proyecto.
  •       Hemos dejado la vergüenza y la timidez de lado y hemos hablado en público y actuado para este trabajo.
  •         Hemos aprendido a escuchar.
  •         Hemos aprendido que, muchas veces, aprender es divertido.




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